Las imágenes de este vídeo son del "Museo do Pobo Galego" en Santiago de Compostela.
" O cego andante " , una canción del grupo de música folk gallego " Fuxan os Ventos", pionero en la reivindicación de un pueblo, de un idioma y de una cultura propia.
" O cego andante"
Ábreme a portiña,
ábreme o postigo,
dame do teu lenzo
¡ai meu ben!
que veño ferido.
Pois se vés ferido
vés a mala hora,
que as miñas portiñas
¡ai meu ben!
non se abren agora.
Miña nai esperte,
nin tanto dormir,
veña ouvir un cego
¡ai meu ben!
cantar e tañir.
E se il canta e pide
dalle pan e viño,
dille ó triste cego
¡ai meu ben!
que siga o camiño.
Non quero seu pan,
nin quero seu viño,
quero que Rosiña
¡ai meu ben!
me ensine o camiño.
Culle, ou Rosiña,
a roca e o liño,
vai co triste cego
¡ai meu ben!
decirlle o camiño.
Anda, ou Rosiña,
máis outro pouquiño,
son curto de vista
¡ai meu ben!
non vexo o camiño.
De condes e duques
xa fun pretendida
e agora dun cego
¡ai meu ben!
véxome rendida.
Eu non che son cego,
nin Dios o permita,
sonche o conde Alberto
¡ai meu ben!
que te pretendía.
Adeus miña casa,
adeus meus quintais,
adeus compañeiras
¡ai meu ben!
para nunca máis.
Fuxan os Ventos
"O cego andante" (traducción)
"O cego andante" (traducción)
Ábreme la puerta,
ábreme el postigo,
dame de tu lienzo
¡ay mi bien!
que vengo herido.
Pues si vienes herido
vienes a mala hora,
que mis puertas
¡ay mi bien!
no se abren ahora.
Mi madre espabile,
ni tanto dormir,
venga a oír a un ciego
¡ay mi bien!
cantar y tañir.
Y si él canta y pide
dale pan y vino,
dile al triste ciego
¡ay mi bien!
que siga el camino.
No quiero su pan,
ni quiero su vino,
quiero que Rosiña
¡ay mi bien!
me enseñe el camino.
Coge, oh Rosiña,
la rueca y el lino,
vete con el triste ciego
¡ay mi bien!
a decirle el camino.
Anda, oh Rosiña,
más otro poquito,
soy corto de vista
¡ay mi bien!
no veo el camino.
De condes y duques
ya fui pretendida
y ahora de un ciego
¡ay mi bien!
me veo rendida.
Yo no te soy ciego,
ni Dios lo permita,
te soy el conde Alberto
¡ay mi bien!
que te pretendía.
Adiós casa mía,
adiós mis quintales,
adiós compañeras
¡ay mi bien!
para nunca más.
ábreme el postigo,
dame de tu lienzo
¡ay mi bien!
que vengo herido.
Pues si vienes herido
vienes a mala hora,
que mis puertas
¡ay mi bien!
no se abren ahora.
Mi madre espabile,
ni tanto dormir,
venga a oír a un ciego
¡ay mi bien!
cantar y tañir.
Y si él canta y pide
dale pan y vino,
dile al triste ciego
¡ay mi bien!
que siga el camino.
No quiero su pan,
ni quiero su vino,
quiero que Rosiña
¡ay mi bien!
me enseñe el camino.
Coge, oh Rosiña,
la rueca y el lino,
vete con el triste ciego
¡ay mi bien!
a decirle el camino.
Anda, oh Rosiña,
más otro poquito,
soy corto de vista
¡ay mi bien!
no veo el camino.
De condes y duques
ya fui pretendida
y ahora de un ciego
¡ay mi bien!
me veo rendida.
Yo no te soy ciego,
ni Dios lo permita,
te soy el conde Alberto
¡ay mi bien!
que te pretendía.
Adiós casa mía,
adiós mis quintales,
adiós compañeras
¡ay mi bien!
para nunca más.
Un grupo muy melódico, me gusta cuando se intenta conservar el folclore gallego.
ResponderEliminarCada lengua tiene su encanto.
Un abrazo
Me encanta ver que se sigue guardando y apoyando nuestra cultura musical.
ResponderEliminarUn abrazo.