martes, 21 de junio de 2011

La ira no es violencia


¿Quién no ha sentido alguna vez ira,... rabia, ...impotencia, ...indignación,... en alguna o en varias situaciones ?


Hace unos días leí un artículo en una revista, que cayó en mis manos  en la sala de espera del dermatólogo, donde se hacía un estudio desmenuzado sobre la ira.. Bajo el título "La ira esclaviza nuestras vidas" hacía una descripción tremendista sobre este sentimiento o emoción que, creo, todos hemos experimentado alguna vez. Parece ser que  tendríamos que ponernos a buen recaudo para no caer en las garras de un sentimiento que pone en peligro nuestra integridad como personas y deteriora nuestra personalidad.

¡El perdón! ¡Hay que perdonar! - Ésta era la pócima mágica para combatir un sentimiento tan atroz.

Cuanto más leía, más en desacuerdo estaba, porque yo he sentido  en varias ocasiones ira, rabia, impotencia, indignación ...... y no se ha visto amenazada mi integridad física, mental, psicológica, temperamental ,..... ¡ni la de las personas causantes de ella!  Todo lo contrario, las consecuencias de mis personales estados de ira han desencadenado un montón de sentimientos que  han fortalecido mi personalidad: me han  hecho sentir que estoy viva, sentir que los hechos que me suceden  no me dejan indiferente, sentir que no paso de todo, sentir que la vida es injusta a veces, sentir que hay acontecimientos que se escapan de mi control, sentir que tropiezo una y otra vez en la misma piedra, ......
....y sobre todo he aprendido que tengo que salir de estas situaciones adoptando la conducta más correcta para no dañar mi persona ni la de los que me rodean.


Interpreto que el autor del artículo, supuestamente psicólogo, se estaría refiriendo a los estados de ira acompañados de un poderoso deseo de venganza. Siendo así podría entender su insistencia a lo largo del escrito: la ira esclaviza, destruye ... y sus reiteradas terapias del perdón.
Pero en este caso no debería hablar de ira, sino de obsesión.

Y la obsesión, en todos los aspectos, sí que esclaviza nuestra vida.

7 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo contigo, yo he sentido lo mismo que tu en muchos momentos, pero son momentos, ratos pasajeros que luego olvidamos y que no influye nuestro estado físico.
    Me parece que es normal tener estos sentimientos, siempre cuando nos deshagamos de ellos, no haya venganza y no vayan mas lejos que unas horas después del acontecimiento que nos ha llevado a ello.
    Buena reflexión Atenea
    Un beso

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  2. Habla mi jefa. Claro que he sentido ira, rabia, etc.. Pero de momento, nunca ganas de venganza, más bien la he pagado conmigo misma o con otros cercanos a mi. Creo que la historia está en reflexionar y ser consciente de lo que sientes. Como bien dices, si no lo conviertes en obsesión, vamos bien. Hay que sentir, de todo, bueno y malo, si no so existimos. Muchos besos. Le devuelvo el ordenata a Nora que luego se cabrea.

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  3. La ira, la rabia etc. son sentimientos naturales que nos acompañan en ciertas situaciones y que se pueden comprender y controlar. Creo que lo importante es su control, no el sentirlos.
    Un abrazo.

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  4. Hola, lindisimo blog espero que tenga el honor de que tu dejes tu huella en mi humilde blog!!

    EvY

    sIGUE TUS SUEÑOS

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  5. Que interesante reflexión Atenea. Yo también creo que la rabia hay que canalizarla y creo que es totalmente necesario dar rienda suelta cuando procede a la ira, desatar nuestra cólera es algo propio de nuestra naturaleza animal y al igual que los demás animales lo hacen el ser humano debe de hacerlo sin perder nunca nuestros valores establecidos que nos separan de la mayor parte del reino animal. Además como bien dices, todo esto no solo nos libera sino que también nos ayuda a madurar y no dejar de aprender, esa es mi opinión estoy totalmente de acuerdo contigo.

    Me ha gustado mucho esta entrada Atenea. Un beso.

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  6. Sí, estoy contigo, creo que todos los sentimientos tienen su hueco, que todos, incluso los que no son agradables, nos aportan algo, nos enriquecen en la experiencia de conjunto que es esto tan extraño de estar vivos. Pero aun así, creo que la clave se situa más en el grado o la intensidad del sentimiento que en el sentimiento mismo. Ser tú quien te aprovechas de él y nunca al contrario. En fin, supongo que es como todo lo demás...

    Un jarrón chino made in cuenca.

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  7. Estoy completamente de acuerdo contigo, lo primero de todo es sentir lo que llevamos y dejarlo fluir, qué nos dice, sin hacer daño a nadie pero dejarlo y después ya vendrán otras cosas. Besos.
    Francesca
    unregaloparati-francesca.blogspot.com

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